miércoles, 7 de diciembre de 2022

 


Figuras destacadas  de argentinas y las dos visitas del Papa

 

Un papa americano

 

Elección del papa Francisco

 

13 de marzo de 2013. Tras la renuncia de Benedicto XVI, la Iglesia tiene que escoger al sumo pontífice católico. Durante el segundo día de cónclave, y en el transcurso de la quinta votación de ese mismo día, sale escogido como el Papa nº 266 el argentino Jorge Mario Bergoglio, recibiendo el nombre  del papa Francisco, el primer papa jesuita y el primero procedente de América.

 

Los argentinos ganadores del Premio Nobel, son cinco.

 

Estos argentinos notables, fueron elegidos entre todos los postulantes, que se presentan cada año en el mundo. Nuestros candidatos participaron de una selección, que se realiza entre aquellas personas e instituciones, que más hayan contribuido al progreso y bienestar de la humanidad.

 

De los 5 argentinos que recibieron el Premio Nobel, dos pertenecen al campo de la medicina, uno al de la química, y los otros dos se destacaron por sus trabajos por la paz.




Carlos Saavedra Lamas (1878-1959)

 

Premio Nobel de la Paz 1936:

Político, diplomático y jurista argentino, fue distinguido con el Premio Nobel de la Paz el 10 de diciembre de 1936. Fue el primer latinoamericano en recibir dicho galardón, por el Pacto Antibélico Saavedra Lamas.

 

Dicho Pacto Antibélico fue firmado por 21 naciones, transformándose en un instrumento jurídico internacional conocido como Pacto Antibélico Saavedra Lamas.

 


 

Bernardo Alberto Houssay (1887-1971)

 

Premio Nobel de Medicina 1947

 

Médico y farmacéutico argentino, de ascendencia francesa, recibió en 1947 el Premio Nobel de Medicina. Son sus investigaciones en el área de la fisiología, sobre el papel desempeñado por las hormonas pituitarias en la regulación de la cantidad de azúcar en sangre (glucosa), lo que lo lleva a obtener el premio.

 

Estos estudios, posibilitaron nuevos avances en el tratamiento de la diabetes. Fue el primer argentino y latinoamericano premiado en el área de las ciencias.

 

 


Luis Federico Leloir (1906-1987)

 

Premio Nobel de Química 1970:

 

Médico, bioquímico y farmacéutico argentino. Luis Federico Leluar, en 1970, se hizo acreedor al Premio Nobel de Química. Fue laureado, por su investigación sobre los nucleótidos del azúcar, y el papel fundamental que desempeñan en el metabolismo de los hidratos de carbono.

 

Se debe a la tarea realizada por Leluar, el conocimiento actual sobre cómo los alimentos se transforman en azúcares, y sirven de combustible a la vida humana.

 


 

Adolfo Pérez Esquivel (1931)

 

Premio Nobel de la Paz 1980:

 

Es un arquitecto, escultor, y activista por la paz y los derechos humanos. Adolfo Pérez Esquivel fue acreedor al Premio Nobel de la Paz en 1980, por su labor en los movimientos por paz, justicia, y en defensa de los derechos humanos en Latinoamérica.

 


 

César Milstein (1927-2002)

 

Premio Nobel de Medicina 1984

 

Cesar Milstein, fue un químico y biólogo argentino nacionalizado británico. Fue galardonado con el Premio Nobel en 1984 por su trabajo sobre anticuerpos. Con su investigación se abrieron las puertas del conocimiento sobre el proceso por el cual la sangre produce anticuerpos.

 

Hay 3 organizaciones internacionales, que fueron galardonadas con el Premio Nobel de la Paz, entre cuyos miembros se encuentran 3 mujeres argentinas.


Efectivamente, estas tres destacadas argentinas, accedieron a la distinción en forma compartida, con los demás miembros de las organizaciones internacionales galardonadas con el Premio Nobel.

 



Conferencia Pugwash de Ciencia y Asuntos Internacionales

 

Miembro: Virginia Gamba

 

Premio Nobel de la Paz 1995:


Virginia Gamba, miembro en ese entonces, del Consejo Ejecutivo de la Conferencia Pugwash de Ciencia y Asuntos Internacionales (1985-1996), recibió el Premio Nobel de la Paz, como parte del equipo liderado por el profesor Joseph Rotblat por impulsar y defender el desarme nuclear en el mundo.

 

Virginia Gamba, nacida en provincia de Buenos Aires en 1954, goza de un amplio reconocimiento acádémico en el mundo. En 1992 inicia su carrera internacional como Directora del Programa de Desarme y Resolución de Conflictos del Instituto de las Naciones Unidas de Investigación sobre el Desarme en Ginebra.

 

 Desde 2015, forma parte del Consejo Académico de la Escuela de Política, Gobierno y Relaciones Internacionales de la Universidad Austral (Argentina). En abril de 2017 fue nombrada Representante Especial del Secretario General de la ONU para la infancia y los conflictos armados.

 


 

Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC)

 

Miembro: Sandra Myrna Díaz

 

Premio Nobel de la Paz 2007:

 

Sandra Myrna Díaz, fue galardonada con el Premio Nobel de la Paz, como integrante del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático de las Naciones Unidas, liderado por el ex vicepresidente de los Estados Unidos Al Gore.  El premio les fue otorgado por alentar la toma de conciencia respecto al cambio climático.

 

La Dra. Sandra Myrna Díaz nació en Córdoba en 1961. Doctorada en Ciencias Biológicas en 1989, actualmente es investigadora Principal del CONICET en el Instituto Multidisciplinario de Biología Vegetal. Además es Profesora Titular de la Cátedra de Ecología de Comunidades y Ecosistemas de la Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de la Universidad Nacional de Córdoba. Díaz es miembro de la Academia Nacional de Ciencias de los Estados Unidos (2009), Academia Nacional de Ciencias de Argentina (2010), Academia Francesa de Ciencias  (2016).

 

Recibió entre otros galardones el Premio Konex (2013) y el Premio Ramón Margalef de Ecología 2017.

 


Organización para la Prohibición de Armas Química (OPAQ)

 

Miembro: Alejandra Suárez

 

Premio Nobel de la Paz 2013:

 

Alejandra Suárez fue laureada con el Premio Nobel de la Paz 2013, como miembro presidente del Consejo Consultivo Científico del organismo. La OPAC tiene su sede en La Haya, Holanda, y su objetivo es la aplicación de la Convención sobre las Armas Químicas, que entró en vigor en 1997. El premio les fue concedido, por su importante labor en la destrucción de armas químicas.

 

Alejandra Suárez, bioquímica rosarina, investigadora del Conicet, es docente de la Facultad de Ciencias Bioquímicas y Farmacéuticas de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) y directora de la Escuela Universitaria de Química. Ejerció la presidencia del Consejo Consultivo Científico de la OPAQ. Fue elegida en 2009 y reelegida en 2012, ejerciendo la presidencia hasta 2016.

 


 

Carlos Gardel, el primer gran ídolo latinoamericano

 

El historiador argentino Felipe Pigna narra el encuentro entre el tango y el hijo de una planchadora francesa que se convirtió en el cantante más célebre del ritmo rioplatense

 

Carlos Gardel, fotografiado en 1930. 

 

“Gardel cada día canta mejor”. El hombre que cambió el tango para siempre falleció en 1935, pero son muchos los argentinos que suscriben esa afirmación, entre ellos el historiador Felipe Pigna, autor de la biografía Gardel (Planeta, 2022). “Canta mejor porque lo escuchamos mejor”, responde en una entrevista con EL PAÍS en Buenos Aires. Pigna recuerda que en los años veinte “para escucharlo bien había que estar muy cerca de él”, ya fuese en teatros o cafés y las grabaciones que empezaron a realizarse en esa época eran de una calidad muy inferior a las actuales. La conmoción provocada por la trágica muerte en un accidente de avión del que fue “el primer gran ídolo latinoamercano”, según Pigna, y el hecho de que se mantenga como la mayor figura mundial del tango un siglo después contribuye a la devoción popular.

 

Charles Romuald Gardes, conocido después mundialmente como Carlos Gardel, nació el 11 de diciembre de 1890 en la ciudad francesa de Tolouse. Hijo de Berthe, madre soltera, llegó en sus brazos a Buenos Aires después de cruzar el Atlántico en un barco de vapor cuando era un bebé de dos años. Ya desde muy pequeño el futuro Zorzal “se acostaba y se despertaba cantando, tomaba un palo de escoba a modo de guitarra y repetía las canciones y melodías que escuchaba”, escribe Pigna en su biografía. A los 11 o 12 años se ganaba unas monedas cantando en cafés y recibía el aplauso de sus oyentes. “Yo voy a ser un gran cantor”, le gustaba repetir para disgusto de su madre, que “como la mayoría de las y los inmigrantes, soñaba con un hijo doctor”.

 

De niño y adolescente, Gardel cantaba folclore. No se había cruzado aún con el tango, que crecía en los bajos fondos, rodeado de la mala fama de sus orígenes prostibularios y de los “bailes inmorales” criticados desde los diarios de la época. “El tango te espera, en algún momento de la vida te lo encontrás”, dice Pigna, en referencia a una frase que los amantes del ritmo del 2x4 suelen decir a aquellos que se fascinan por primera vez con la más internacional de las músicas argentinas.

 

“La historia del tango está muy vinculada a la inmigración. Es una música muy ecléctica con elementos folclóricos argentinos, también elementos de la habanera, del tango andaluz, de la música italiana. Hay una gran mezcla que refleja como pocas expresiones culturales la fusión entre lo argentino y lo inmigrante”, dice Pigna. Gardel, nacido en Francia y nacionalizado argentino, es ejemplo de ese sincretismo.

 

“El tango viajó a París en 1910, cuando todavía se bailaba más que se cantaba, y triunfó en medio de un intenso debate moral sobre lo que tenía de danza erótica. Hasta el Papa se pronunció contra ese baile. Pero el triunfo en París hizo que la sociedad de Buenos Aires, que siempre miró mucho a París, lo convalidase y las niñas bien empezaron a tocar tangos al piano”, continúa el historiador. “El tango tiene una poesía tremendamente profunda y filosófica. Las letras dejaron de hablar de cuestiones anecdóticas o ligadas al sexo y pasaron a hablar de todas las cuestiones del ser humano, como el amor, la soledad, la alegría, la tristeza, la pregunta de qué hacemos acá, cuestiones que por regla general la música popular no se lo plantea”, detalla.

 

Carlos Gardel y Rosita Moreno, en 1935.

 

La noche más feliz

 

El encuentro de Gardel con el tango, a finales de la primera década del siglo XX, los cambió a los dos para siempre. “Me pregunta cuál fue el día más feliz de mi vida. No fue un día, fue una noche, la más feliz y de la que tengo más gratos recuerdos. Fue cuando canté mi primer tango de éxito, el tango que realmente me dio una oportunidad. Con él conseguí llamar la atención del público y de los empresarios. ¿Quiere ver la ironía del título? Se llamaba Mi noche triste”, declaró Gardel a una revista brasileña en 1934.

 

Desde entonces, no se separaron más. El inventor del tango-canción escribió muy pocas letras, pero compuso de oído algunas de las melodías más famosas de este género musical. Por una cabeza es uno de los tangos más difundidos en el mundo. Se convirtió en un clásico por una escena de la película Perfume de mujer, en la que Al Pacino y Gabrielle Anwar bailan esta bella canción. La melodía le surgió de madrugada y ahí llamó a su amigo, al músico Terig Tucci, para pedirle que se levantase de la cama y fuese hacia el piano. “Tomá nota, Beethoven”, le dijo mientras se la silbaba desde el otro del teléfono.

 

Triunfó en Argentina, España, Francia, Estados Unidos y en gran parte del continente latinoamericano. “Gardel fue el primer gran ídolo latinoamericano. En los hoteles y en los aeropuertos lo esperaban miles de personas. Sería un rockstar en una época donde no había Instagram ni Youtube y se daba a conocer por su presencia en el cine, en la radio, en las notas. Recibía unas 15,000 cartas por mes de admiradoras, que no alcanzaba a contestar, y aprendió a escribir con las dos manos para poder autografiar las fotos que repartía entre sus fans”, relata Pigna.

 

“Cuando vuelve de París después de haber cantado en la Ópera y haber actuado en películas francesas ya era Gardel, el argentino triunfante”, remarca. Aún hoy, en Argentina se usa la frase “es Gardel” para referirse a alguien que tiene éxito.

 

El cantante argentino, Carlos Gardel.

 

Amante de la buena mesa y de la noche, recurría al gimnasio y a la disciplina para mantener una figura siempre impecable que muchos intentaban imitar. “Gardel, que era un tipo de los sectores populares, termina imponiendo la moda aún en las clases altas, que se vestían y peinaban como Gardel”, agrega.

 

Pigna asegura que el Morocho del Abasto no estaba interesado en la política partidaria, pero sí que tuvo siempre presente sus orígenes humildes. En 1933, en medio de una grave crisis económica en Argentina, le propusieron hacer la foto del lanzamiento [de un disco] en alguno de los dos hoteles más lujosos de Buenos Aires. “Él los rechazó y eligió fotografiarse en Villa Desocupación, un barrio muy pobre”, señala.

 

El jueves 28 de marzo de 1935, el Mago inició la que sería la última gira de su vida. Puerto Rico, Colombia, La Habana y México eran algunas de las escalas que tenía previstas. No la terminó. El 24 de junio, el cantante de tango murió en el aeropuerto de Medellín, cuando el avión en el que se aprestaba a viajar hacia Cali se salió de la pista central y se estrelló contra otro.

 


Funeral de Carlos Gardel en el cementerio de la Chacarita de Buenos Aires.


Archivo General dela Nación.



 

Jorge Luis Borges

 

Nacido en Buenos Aires, el 24 de agosto de 1899. Fue un poeta, ensayista y escritor argentino, una de las máximas figuras de la literatura mundial.

 

Creció en un ambiente que propició su interés por la lectura, el estudio y los idiomas. Desde temprana edad, escribió tanto en español como en inglés. Estudió en Ginebra e Inglaterra. Vivió en España, desde 1919; y colaboró en revistas literarias francesas y españolas, donde publicó ensayos y manifiestos.

 

De regreso a la Argentina, participó con Macedonio Fernández en la fundación de las revistas Prisma y Proa y firmó el primer manifiesto ultraísta. En 1923, publicó su primer libro de poemas, Fervor de Buenos Aires, y, en 1935, Historia universal de la infamia, compuesto por una serie de relatos breves (formato que utilizó en publicaciones posteriores).

 

Formó parte de grupos artísticos e intelectuales, como Grupo Florida, Martín Fierro y Sur, junto a otras figuras de las vanguardias artísticas y literarias, entre otras: Victoria Ocampo, Oliverio Girondo, Leopoldo Marechal, Ricardo Güiraldes, Raquel Forner y Xul Solar.

 

Durante los años treinta, publicó diversas obras en colaboración con Bioy Casares, de entre las que cabe subrayar Antología de la literatura fantástica. Su amistad con este escritor le permitió compartir intereses personales y colaboración profesional, con un similar sentido del humor y de la ironía. Juntos crearon *Prosa y verso de Quevedo, Modelo para la muerte, Libro del cielo y el infierno, Dos fantasías memorables, Antología de la literatura fantástica (con Victoria Ocampo)*. Además, participaron en guiones de cine, como Los orilleros, de Ricardo Luna, e Invasión, de Hugo S. Muchnik. Varios textos de Borges fueron llevados a la pantalla grande, por ejemplo, el cuento Emma Zunz (Días de odio, de Leopoldo Torres Nilsson).

 


Afiche Días de odio (1954)

 

En esos años, amplió su actividad literaria con la crítica, la docencia universitaria, en la Argentina y en el exterior, y la traducción de grandes obras, como La metamorfosis, de Franz Kafka; Las palmeras salvajes, de William Faulkner; Orlando, de Virginia Woolf; Hojas de hierba, de Walt Whitman; La carta robada, de Edgar Allan Poe, Ulises, de James Joyce.

 

Fue bibliotecario en Buenos Aires de 1937 a 1945, conferenciante y profesor de literatura inglesa en la Universidad de Buenos Aires, presidente de la Sociedad Argentina de Escritores, miembro de la Academia Argentina de las Letras y director de la Biblioteca Nacional de Argentina desde 1955 hasta 1974. En 1961, compartió con Samuel Beckett el Premio Formentor, otorgado por el Congreso Internacional de Editores.

 


Borges, Jorge Luis. El Aleph (1949), Buenos Aires, Argentina. Ed. Losada S.A.

 

Publicó libros de poesía como El otro, el mismo, Elogio de la sombra, El oro de los tigres, La rosa profunda, La moneda de hierro. Cultivó la prosa en títulos, como El informe de Brodie y El libro de arena. También publicó libros en los que se mezclan prosa y verso; libros que aúnan el teatro, la poesía y los cuentos. Ejemplos de esta fusión son los títulos La cifra y Los conjurados.

 

Borges perdió a su padre en 1938, año en que comienza su paulatina pérdida de la visión. En la década de los cincuenta, se le prohibió leer y escribir, por lo que debió componer sus escritos de memoria y dictarlos. A partir de 1971, comenzó a viajar acompañado por Maria Kodama, alumna, discípula y, luego, su asistente y compañera de trabajo y de vida.

 

Recibió numerosos premios y reconocimientos durante su trayectoria: Premio Nacional de Literatura (Argentina),1956; Premio Formentor (España), 1961; Premio del Fondo Nacional de las Artes (Argentina), 1963; Caballero de la Muy Distinguida Orden del Imperio Británico, 1965; Medalla de Oro del IX Premio de Poesía (Florencia), 1965; La Orden del Sol (Perú), 1965; Orden del Mérito de la República Italiana, 1968; Premio Jerusalem (Israel), 1971; Doctor honoris causa (Universidad de Columbia), 1971; Doctor honoris causa (Universidad de Yale), 1971; Doctor honoris causa (Universidad de Oxford), 1971; Doctor honoris causa (Universidad de Michigan), 1972; Premio Alfonso Reyes (México), 1973; Doctorado honoris causa (Universidad de Santiago de Chile), 1976; Orden Bernardo O'Higgins (Chile), 1976; Doctor honoris causa (Universidad de La Sorbona), 1977; Premio Miguel de Cervantes (España), 1979; Medalla de Oro de la Academia Francesa, 1979; Orden del Mérito (República Federal de Alemania), 1979; Cruz del Halcón (Islandia), 1979; Doctor honoris causa (Universidad de Harvard), 1981; Premio Balzan (Italia), 1981; Legión de Honor (Francia), 1983; Gran Cruz de Alfonso X el Sabio (España), 1983.

 

En 1986, se mudó a Ginebra (Suiza), ciudad donde había residido en su juventud y por la cual sentía admiración. Allí se casó con Maria Kodama en abril de ese año.



Falleció el 14 de junio de 1986. Sus restos descansan en el cementerio de Plainpalais, Ginebra.

 

Créditos: ![Los herederos](/sites/default/files/los-herederos.jpg )


 


Che Guevara [Ernesto Guevara]

 

(Nació en Rosario, Argentina, en el 1928 y murió en Higueras, Bolivia, en el 1967), Revolucionario iberoamericano. Junto con Fidel Castro, a cuyo movimiento se unió en 1956, fue uno de los principales artífices del triunfo de la revolución cubana (1959). Desempeñó luego cargos de gran relevancia en el nuevo régimen, pero, insatisfecho con la inoperancia de los despachos y fiel a su propósito de extender la revolución a otros países de Latinoamérica, en 1966 retomó su actividad guerrillera en Bolivia, donde sería capturado y ejecutado un año después.

 

 

Ernesto Che Guevara

 

Entregada así su vida en la lucha contra el imperialismo y la dictadura, el Che Guevara se convirtió en el máximo mito revolucionario del siglo XX. Fue de inmediato un icono de la juventud del Mayo del 68, y su figura ha quedado como símbolo atemporal de unos ideales de libertad y justicia que, como los héroes de antaño, juzgó más valiosos que la propia vida. Todavía en nuestros días se exhibe con frecuencia, en las acciones contestatarias, aquel perfil suyo basado en la célebre fotografía de Alberto Korda.

 

Biografía

 

Ernesto Che Guevara nació en una familia acomodada de Argentina, en donde estudió medicina. Su militancia izquierdista le llevó a participar en la oposición contra Juan Domingo Perón; desde 1953 viajó por Perú, Ecuador, Venezuela y Guatemala, descubriendo la miseria dominante entre las masas de Hispanoamérica y la omnipresencia del imperialismo norteamericano en la región, y participando en múltiples movimientos contestatarios, experiencias que lo inclinaron definitivamente hacia el marxismo.

 

En 1955 Ernesto Che Guevara conoció en México a Fidel Castro y a su hermano Raúl Castro, que preparaban una expedición revolucionaria a Cuba. Guevara trabó amistad con los Castro, se unió al grupo como médico y desembarcó con ellos en Cuba en 1956. Instalada la guerrilla en Sierra Maestra, Guevara se convirtió en lugarteniente de Fidel y mandó una de las dos columnas que salieron de las montañas orientales hacia el oeste para conquistar la isla. Participó en la decisiva batalla por la toma de Santa Clara (1958) y finalmente entró en La Habana en 1959, poniendo fin a la dictadura de Fulgencio Batista.

 


El Che con Fidel Castro

 

El triunfo de la revolución, llevada a cabo con escasos medios, se vio facilitado por la insostenible situación del país en aquellos años. Pese a registrar la más alta renta per cápita de América Latina, la riqueza se concentraba en pocas manos; este fortísimo desequilibrio social se repetía en los marcados contrastes entre el campo y la ciudad.

 

De la revolución a la política

 

El nuevo régimen revolucionario concedió a Guevara la nacionalidad cubana y le nombró jefe de la Milicia y director del Instituto de Reforma Agraria (1959), luego presidente del Banco Nacional y ministro de Economía (1960), y, finalmente, ministro de Industria (1961). En aquellos años, Guevara representó a Cuba en varios foros internacionales, en los que denunció frontalmente el imperialismo norteamericano. En un viaje alrededor del mundo se entrevistó con Gamal Abdel Nasser, Jawaharlal Nehru, Sukarno y Josip Broz Tito (1959); en otro viaje conoció a diversos dirigentes soviéticos y a los chinos Chu En-Lai y a MaoTse-Tung.

 

En la tarea de la construcción en Cuba de una nueva sociedad, y especialmente en el campo de la economía, el Che Guevara fue uno de los más incansables colaboradores de Fidel Castro. En la polémica económica que tuvo lugar en los inicios del nuevo régimen se decantó por una interpretación original, creativa y no burocrática ni institucionalizada de los principios marxistas. Buscando un camino para la independencia real de Cuba, se esforzó por la industrialización del país, ligándolo a la ayuda de la Unión Soviética, una vez fracasado el intento de invasión de la isla por Estados Unidos y clarificado el carácter socialista de la revolución cubana (1961).

 

Fragmento de un discurso de Guevara ante la ONU


(Nueva York, 11 de diciembre de 1964)

 

Su inquietud de revolucionario profesional, sin embargo, le hizo abandonar Cuba en secreto en 1965 y marchar al Congo, donde luchó en apoyo del movimiento revolucionario en marcha, convencido de que sólo la acción insurreccional armada era eficaz contra el imperialismo.

 



En Bolivia

 

Relevado ya de sus cargos en el Estado cubano, el Che Guevara volvió a Iberoamérica en 1966 para lanzar una revolución que esperaba que fuese de ámbito continental: valorando la posición estratégica de Bolivia, eligió aquel país como centro de operaciones para instalar una guerrilla que pudiera irradiar su influencia hacia Argentina, Chile, Perú, Brasil y Paraguay. Al frente de un pequeño grupo intentó poner en práctica su teoría, según la cual no era necesario esperar a que las condiciones sociales produjeran una insurrección popular, sino que podía ser la propia acción armada la que creara las condiciones para que se desencadenara un movimiento revolucionario; tales ideas quedaron recogidas en su libro La guerra de guerrillas (1960).

 

El Che, mito revolucionario

 

Sin embargo, su acción no prendió en las masas bolivianas. Desde un principio su grupo, bautizado como Ejército de Liberación Nacional y compuesto por veteranos cubanos de Sierra Maestra y algunos comunistas bolivianos, se encontró con la falta de apoyo de los campesinos, ajenos por completo al movimiento. Sin ningún respaldo popular en el mundo rural, y sin apoyo en las grandes ciudades por el rechazo de las organizaciones políticas comunistas, las posibilidades de éxito menguaron drásticamente.

 

Aislado en una región selvática en donde padeció la agudización de su dolencia asmática, Ernesto Guevara fue delatado por campesinos locales y cayó en una emboscada del ejército boliviano en la región de Valle Grande, donde fue herido y apresado el 8 de octubre de 1967. Dado que el Che se había convertido ya en un símbolo para los jóvenes de todo el mundo, los militares bolivianos, aconsejados por la CIA, quisieron destruir el mito revolucionario, asesinándole para después exponer su cadáver, fotografiarse con él y enterrarlo en secreto.

 

En 1997 los restos del Che Guevara fueron localizados, exhumados y trasladados a Cuba, donde fueron enterrados con todos los honores por el régimen de Fidel Castro.

 

 

La imagen de Ernesto Che Guevara queda incompleta si no se consideran, junto a la de revolucionario, sus facetas como ideólogo y teórico de la guerrilla, de la lucha armada en pequeños grupos como única forma revolucionaria de actividad política posible en los países subdesarrollados. Sus ideas se hallan expuestas en textos como el famoso Mensaje a la Tricontinental (1967) y el ya citado libro La guerra de guerrillas (1960).

 

Si bien escribió muchísimo, la mayor parte de su obra sigue inédita. La integran manuscritos, cartas, discursos, proclamas y, sobre todo, artículos publicados en Verde olivo, el órgano de las Fuerzas Armadas cubanas, en las que el Che ostentaba el grado de comandante. Los más recordados son aquellos en los que evoca la revolución cubana (Una revolución que comienza, 1959 y siguientes) y los de política económica (Contra el burocratismo, 1963 y siguientes). Del diario que Ernesto Guevara había ido escribiendo durante toda su vida, se publicó póstumamente la parte referente a la guerrilla boliviana: Diario del Che en Bolivia (1968).

 

Este último libro, que relata su lucha guerrillera en Bolivia hasta el día inmediatamente anterior a su captura, constituye el más impresionante testimonio de su personalidad. El Che describe el día a día de la guerrilla por dentro, en su aspecto cotidiano; las mil dificultades prácticas, las debilidades, los errores y litigios entre compañeros y su precario estado de salud da lugar a un cuadro nada idealizado. Pero es sobre todo el estilo casi distanciado de este diario, incluso en los momentos más difíciles, lo que revela el lado humano del Che en el último período de su vida: en su ánimo reinaban una enorme calma y una profunda serenidad, debidas a la íntima convicción de lo justo de sus ideales y a la razonada aceptación del riesgo de morir en la lucha.


https://www.biografiasyvidas.com/biografia/g/guevara.htm [fecha de acceso: 5 de diciembre de 2022].

  


 

Las dos visitas del papa Juan Pablo II a la Argentina

 

Juan Pablo II, quien fue canonizado por Francisco en el 2014, llegó al corazón de los católicos argentinos al visitar nuestra tierra en dos oportunidades. La primera vez, en 1982, días antes del fin de la Guerra de Malvinas. La segunda, en 1987, para las III Jornadas Mundiales de la Juventud, cuando llevó su mensaje a nueve ciudades del país.

  

https://surdelsur.com/es/5-argentinos-ganadores-del-premio-nobel/

 

https://dirdocumentacion.blogspot.com/2015/05/5-de-mayo-1959muere-carlos-saavedra.html

 

ttps://twitter.com/hashtag/diadelacienciaylatecnica?src=hash

 

https://es.wikipedia.org/wiki/Luis_Federico_Leloir

 

https://tiempo30.com/2021/11/27/el-nobel-de-la-paz-adolfo-perez-esquivel-cumplio-90-anos/

 

https://www.biografiasyvidas.com/biografia/m/milstein.htm

https://childrenandarmedconflict.un.org/es/historia/about-us/representante-especial/virginia-gamba/

 

https://es.wikipedia.org/wiki/Sandra_Myrna_D%C3%ADaz#/media/Archivo:Sandra_D%C3%ADaz.-foto-ipbes.1-1_CONICET_(cropped).jpg

 

https://www.conicet.gov.ar/una-cientifica-del-conicet-integra-la-organizacion-ganadora-del-nobel-de-la-paz/

 

https://es.wikipedia.org/wiki/Historia_de_la_Argentina

 

https://elpais.com/argentina/2022-08-08/felipe-pigna-carlos-gardel-fue-el-primer-gran-idolo-latinoamericano.html

 

https://www.argentina.gob.ar/secretariageneral/museo-casa-rosada/iconos-argentinos/borges

 

https://www.biografiasyvidas.com/biografia/g/guevara.htm

 


Para el próximo sábado 10 de diciembre de 2022 publicaré la Historia de Ecuador

diciembre 07, 2022   Posted by Los Mina Digital with No comments

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